MANUSCRITO H, c. 100 r.
El anemoscopio es esencialmente una veleta, un instrumento que indica la dirección del viento. Cuando el viento es lo suficientemente fuerte, hace girar el anemoscopio, que gira a lo largo de un eje vertical hasta que su puntero se alinea con la dirección del viento. Leonardo, siempre en su afán por mejorar sus máquinas voladoras, combinó este instrumento con el anemómetro de escobillas. Su intención era poder medir las mejores condiciones para el vuelo, lo que permitiría a sus máquinas planear de forma más eficaz aprovechando la fuerza del viento.